lunes, 27 de junio de 2011

Sopa de tomate

   Una receta que se puede tomar caliente, templada e incluso fría, según la temperatura exterior o las preferencias de cada cual.

   Ingredientes
   - Tomates
   - Cebollas
   - Leche evaporada
   - Queso rallado
   - Orégano
   - Aceite
   - Sal

   Elaboración
   Pelar y picar las cebollas y pocharlas en un poco de aceite. Cuando la cebolla esté transparente, añadir el tomate limpio y en trozos y unas hojas de orégano. Si queréis que la sopa quede bien fina, es mejor que los tomates vayan pelados, para ello, hay que hacerles unos cortes y escaldarlos en agua hirviendo dos minutos, así se pelan muy fácilmente. 
   Hay que dejar que el tomate se deshaga y esté blando. Batirlo bien hasta que no queden trozos de tomate o cebolla. Agregar la leche evaporada mientras se continúa batiendo. Rectificar de sal y lista. Por supuesto, podéis cambiar la leche evaporada por leche normal o nata, pero la evaporada le da un toque.
   A la hora de montar el plato se puede poner el queso rallado en el medio de la sopa y espolvorearla con un poco de orégano o añadir unos picatostes de pan.


¿La preferís fría, templada o caliente?

2 comentarios:

  1. ... pero qué sencillez y qué buena pinta. La hago hoy para comer.
    bss

    ResponderEliminar
  2. Pues si, es muy sencilla, aunque claro, puede complicarse añadiendo zanahoria, pimiento,... pero yo la prefiero así.

    Si la pruebas, cuéntame que te parece.

    Bicos.

    ResponderEliminar